Aprender en grupo

Se logra diseñando y generando espacios y situaciones para ello: aprender a través de la acción-investigación y aprender con otros. Estos espacios pueden ser elaborados o elementales, pero en todo caso suponen acción-investigación, grupos, competencias, intercambio y también visión global y acción local. Son situaciones en las cuales, más tarde o más temprano, todos nos iremos situando.

El tema del medio ambiente es muy favorable para que los niños y las niñas del nivel inicial puedan trabajar en equipo de manera cooperativa y ejercitarse en el desarrollo de sus habilidades sociales. Actividades como los proyectos y talleres sirven para ese fin; ejemplos de ellos son:

  • Aprender en grupo con agua: montar una obra de teatro sobre la contaminación y cuidados del agua.
  • Aprender en grupo con energía: construir una cocina solar.
  • Aprender en grupo con biodiversidad: trabajar en la granjita escolar o cuidar un huerto.
  • Aprender en grupo con residuos sólidos: organizar una función de títeres para promover el reciclaje.

Es importante recordar en el aprender haciendo que cuando se permite al niño o a la niña ‒respetando su derecho a aprender en libertad‒ a aprender haciendo, ello no significa que hace lo que quiere, sino que quiere todo lo que hace. Así, si bien cuando el niño o niña juega por jugar no reflexiona sobre sus conocimientos, en cambio, cuando juega con una guía o estructura va construyendo nuevos conocimientos y saberes. En los temas ambientales es sumamente importante la mediación del o de la docente para que los niños y niñas reflexionen críticamente y asuman compromisos y responsabilidades que les faciliten la convivencia. También para que sean conscientes del valor de los recursos y el uso óptimo de los mismos; para estar en armonía con la naturaleza; y para que en su actuación cotidiana sepan qué hacer en beneficio de sí mismos y a favor de los otros y de la propia naturaleza.