Resumen Ejecutivo
Parte dos / Calidad ambiental de vida
Capítulo 7 | Gestión de residuos y sustancias químicas
El manejo de los residuos sólidos domiciliarios en el país es responsabilidad de los gobiernos locales. En la Ley General de Residuos se establece una estructura de gestión de los residuos cuya rectoría corresponde al MINAM.
Se tiene un avance considerable en el cálculo de la generación percápita de residuos sólidos domiciliarios y, en menor medida, se han desarrollado esfuerzos para el cálculo de la generación de residuos de las actividades comerciales, de instituciones públicas y del barrido de las calles (residuos no domiciliarios), con lo cual se ha determinado la generación percápita de residuos sólidos municipales con una muestra considerable de todas las regiones del país. La generación de residuos sólidos municipales promedio para el país es de 0,56 kg/hab./día.
Uno de los problemas más álgidos en la gestión integral de residuos sólidos se encuentra en la etapa de disposición final segura de residuos sólidos municipales, ya que actualmente solo existen 11 rellenos sanitarios autorizados en el país, de los cuales 4 se encuentran en la ciudad de Lima; es por este motivo que en el ámbito nacional solo el 41,3 % de los residuos municipales son dispuestos adecuadamente.
El marco normativo de gestión de los residuos sólidos está definido por la Ley General de Residuos Sólidos. Las municipalidades provinciales son responsables por la gestión de los residuos sólidos de origen domiciliario, comercial y de aquellas actividades que generen residuos similares a estos, en todo el ámbito de su jurisdicción.
Diversos gobiernos locales han adoptado una política de gestión integral de residuos sólidos, con la cual se vienen resolviendo diferentes problemas relacionados con el manejo de estos residuos. Los residuos sólidos del ámbito no municipal, es decir, los residuos hospitalarios, de actividades de construcción, de actividades de agricultura, de actividades de producción industrial y de instalaciones o actividades especiales son de responsabilidad de cada sector. Estos reportan al MINAM la gestión de residuos sólidos a través de las declaraciones anuales del manejo de los mismos; sin embargo, no todos los sectores cumplen con realizar el reporte, es por ello que actualmente se vienen adoptando medidas que permitan mejorar la presentación de estas declaraciones.
Por otro lado, el país muestra un incremento constante en el gasto en limpieza pública en el periodo 2008-2013, lo cual se debe a la creciente preocupación por el manejo integral de los residuos sólidos y los incentivos que el Ministerio de Economía y Finanzas (MEF) ha generado.
En cuanto a la recaudación municipal para los gastos de limpieza (pago de impuestos), existen altos márgenes de morosidad. Esta situación representa uno de los graves problemas para la gestión integral de los residuos sólidos y es motivo por el cual los municipios tengan que subsidiar gran parte de los gastos de limpieza pública.
Debido a la falta de infraestructura adecuada para la disposición final de residuos sólidos, una gran cantidad de residuos sólidos son dispuestos inadecuadamente, contaminando de manera directa el suelo y los cuerpos de agua de nuestro país. Ante esto se ha generado una serie de guías y proyectos para el cierre de botaderos, los cuales se vienen implementando en el país.
Se han impulsado diversas iniciativas orientadas a elevar el nivel de cultura ambiental y la activa participación ciudadana en la gestión de los residuos sólidos.
Respecto a las sustancias químicas, el consumo nacional de las sustancias químicas se basa principalmente en las importaciones de las mismas, y en torno a esto se dispone de información de aquellas sustancias que cuentan con una partida arancelaria.
La legislación nacional regula la gestión de las sustancias químicas por su uso, lo que representa un reto en la articulación efectiva de las autoridades involucradas para el cumplimiento de las políticas nacionales de gestión integral de las sustancias químicas.
Distintas autoridades, desde sus respectivos ámbitos de competencia, están a cargo de regular ciertos aspectos de la gestión de las sustancias químicas, regulación que puede darse de manera independiente y está sujeta a las prioridades de cada autoridad. Existen mecanismos de coordinación que involucran a las autoridades, empresas, universidades y sociedad civil en la toma de decisiones del país con respecto a la gestión de las sustancias químicas.
En los últimos años se viene visualizando un mayor respaldo por parte del gobierno en torno a construir y consolidar un sistema nacional para la gestión de la infraestructura de la calidad y de los servicios que provee; esto fomenta la formulación de normas técnicas peruanas de gestión ambiental que podrían orientarse a la gestión del ciclo de vida de las sustancias químicas, la ecoeficiencia, la ecoinnovación, la producción más limpia y la producción baja en carbono. Cabe resaltar que es necesario avanzar en la promoción de su aplicación.
El gobierno viene respaldando la implementación de un sistema de Registro de Emisiones y Transferencias de Contaminantes para contar con una base de datos con información anualizada de los contaminantes que se emiten y transfieren. De otro lado, se viene avanzando en la implementación de mecanismos y medidas que permitirán la clasificación e identificación de sitios contaminados en el país.